La autenticidad siempre ha sido piedra angular del heavy metal, pero el aumento de los sectores VIP en los conciertos que ofrecen todo, desde accesos al backstage, hasta fotos pagadas, provocó un debate polarizado. Thomas “Angelripper” Such, bajista de la leyenda germana del thrash, Sodom, fue categórico en su punto de vista: “En lo personal estas prácticas no son bienvenidas, además me parecen poco éticas en cuanto al espíritu del metal.
En una reciente entrevista con RapidMetalFire, Angelripper compartió su punto de vista, reflexionando sobre su experiencia durante el festival The Clash Of The Ruhrpott.
“Lo odio. No lo quiero. Lo tuvimos cuando tocamos con Kreator en el ‘Klash Of The Ruhrpott’ en un anfiteatro en Gelsenkirchen, Alemania, en julio de 2024. También estuvieron Destruction y Tankard. Ellos lo hicieron. Si van a hacer una sesión de autógrafos, los fans tienen que pagar por eso”, narra Angelripper.
Más adelante explicó porqué se opone a que se le cobre a los fans en esta interacción. “En mi opinión, no es mi manera. Cuando hago sesiones de autógrafos, lo hago gratis. No quiero plata de ahí. Me quedo en el hotel o lo que sea. Pero nunca se me ha ocurrido la idea de ganar plata por esa vía, o ganársela con paseítos tras bambalinas. ¿Sabes lo que es un paseo por un escenario? La gente paga plata para subirse al escenario. Yo digo, ‘Ok, aquí está el kit de batería. Aquí está el amplificador de la guitarra. Aquí está el backline (equipo electrónico de amplificación de audio)”.
“Lo odio. Esto no tiene nada que ver con el metal. Algunas bandas venden los accesos al backstage, entonces los fans tienen la oportunidad de saludar a los músicos u obtener una placa, o lo que sea. Con Kiss lo van a hacer. Y si te sacas una foto con Kiss, tienes que pagar 2 mil dólares, y que venga el siguiente. Eso nada tiene que ver con el heavy metal. Esto no fue lo que aprendí en la escena del metal”.
La postura de Angelripper tiene su raíz en la creencia que los fans merecen más por su lealtad y apoyo, además empatiza con su compromiso personal de asegurarse que no se le cargue a los fans por gestos tan simples como un autógrafo o una foto.
“¿Y nos vamos a quedar hasta que el último obtenga lo que quiere? A veces tenemos solo media hora, a lo más una para repartir firmas o sacarse fotos…A veces hay cientos de personas que vienen por un autógrafo, la foto, y decimos, ‘bueno, hagan una foto, vamos’, porque queremos que al final todos obtengan su autógrafo, pero nunca he sacado un peso de ahí. Es estúpido.
“Sodom es la única banda de metal que jamás haría dinero con sesiones de autógrafos o de fotografías”.
La opinión de Angelripper ofrece un marcado contraste a una tendencia que crece exponencialmente en la industria de la música, especialmente entre los números más grandes. Para él, toda está en las raíces del heavy metal: Una comunidad edificada en el respeto mutuo y una pasión compartida por la música y no la explotación.
